¿Por qué realmente nos pagan más? ¿Cómo nos aseguramos estar entregando suficiente valor? ¿Qué debería pasar con nuestras acciones conforme ascendemos en una organizazión?
Podemos contestar estas preguntas desde distintos lugares… Podríamos hablar del valor, de la integridad de nuestras acciones, del nivel de compromiso o acuentabilidad, de la magnitud de nuestras promesas o podríamos hasta hablar de plusvalía, liderazgo o nuestra capacidad de influencia.
Pero yendo a un plano más concreto y táctico. Lo que un gerente, director, CEO hace es:
Asegurarse de que sus acciones tengan cada vez mayor apalancamiento. Así se asegura eludir la extincción.
Todo gran gerente sabe esto y también sabe que es algo en lo que debe convertirse en experto.
Apalancamiento (leverage en inglés), viene de palanca. Es muy ilustrativo tomar el ejemplo de una palanca para explicar esto:
Si uno toma una barilla de metal y coloca una piedra como pivot en el medio podemos hacer fuerza de un lado para elevar una carga del otro. Si ejercemos presión cerca del pivot o punto de apoyo de la palanca, podemos elevar una cargar considerable, pero el alejarnos del pivot nos permitirá tener más palanca y elevar objetos más pesados. La misma acción (efuerzo) tiene un resultado multiplicador.
Siendo concreto y llevado a un plano gerencial, está analogía nos serviría pera pensar nuestras acciones. Todas nuestras acciones requieren un tiempo determinado y esfuerzo, ahora hay ciertas acciones que tienen mayor impacto que otras.
Entonces, la clave para traer más valor; es que elijamos deliberadamente interpretar aquellas acciones que tengan un alto nivel de impacto o apalancamiento.
La labor gerencial se resume en ello, porque conforme crecemos en la estructura se supone que nuestro accionar tendrá cada vez más impacto. No es por el poder o el cargo que esto ocurre, sino porque aprendimos a usar mejor nuestro tiempo y a ser más efectivos en nuestros intercambio.
Especificamente en el caso de un mando medio, sobretodo en equipos que ejecutan servicio, la acción que tiene el mayor apalancamiento de todas, son aquellas conversaciones que tiene con su equipo.
Porque su equipo es su brazo ejecutor y para tener impacto sobre el equipo
no hay manera más poderosa que comunicandose eficazmente.
Te comparto este cuadro donde comparo dos acciones que podemos interpretar con nuestro equipo a la hora de atender un problema o en la búsqueda de un resultado.
Las acciones de la izquierda tendrán poco impacto. Pero las de la derecha, estarán potenciando el impacto de las intervenciones con tú equipo. Y esto permitirá impulsar el desempeño general.